El Realizador

Eneagrama. Tipología Tres El Realizador Helen Palmer

Característica esencial “perdida”Se ha perdido la conexión con la esperanza universal que dice todo lo que debe hacerse será realizado de acuerdo con las leyes y principios universales

Creencia compensatoria
El mundo recompensa el hacer y no el ser. Las personas son amadas por lo que hacen y no por quienes son

Estrategias relacionadas con el foco de atención
Obtener éxitos, logros y una buena imagen, ya que el amor proviene de la aprobación por el trabajo realizado. Concentrarse en objetivos y metas, y seguir siempre hacia adelante sin prestar atención a las emociones

La trampa
La creencia que un alto grado de eficiencia asegurara el éxito, el reconocimiento, el amor y la aceptación de los demás

Generadores de energía
El auto engaño, la alteración de la imagen externa y el relato de una historia ganadora como medios para lograr los objetivos planteados. El engaño a si mismo con respecto a los sentimientos reales

Lo que se trata de evitar
Ser un fracaso, incapacitarse por sentir emociones reales (el miedo inconsciente de no ser capaz de alcanzar las metas fijadas)

Aspectos positivos
Triunfador, competente, entusiasta y líder

La paradoja
El éxito en el mundo externo no brida ni satisfacción interna ni sentimientos verdadero de bienestar personal

Camino al desarrollo
. Moderar el ritmo
. Estar abierto a sentir las emociones
. Comprender que un fracaso no es un desastre

Lo esencial
Recuperar la verdad que dice que el amor llegará hacia ti por quien eres y no por lo que haces.

La premisa básica:

Queda escondido, entre telones, el estado original de tener esperanza en que todo funciona y se realiza de acuerdo a la ley universal. En consecuencia, se llega a creer que lo que se hace depende de los esfuerzos individuales de cada persona. Se aprende a ganarse el amor, la aceptación y el reconocimiento por trabajar intensamente para ser el mejor y mantener una buena imagen. Al mismo tiempo, se desarrolla una galopante energía de auto-engaño para que esté de acuerdo con la imagen de éxito y aprobación. La atención, naturalmente, va hacia las tareas y los logros.
La cuestión central para la curación
La tarea de los Realizadores es evitar que la vida se convierta en una sucesión de tareas. Los Realizadores no son seres humanos sino seres “hacientes”. Así que la simple receta que aquí prescribimos es aminorar la velocidad lo suficiente como para permitir que sus sentimientos puedan aflorar y darse cuenta de que recibimos el amor y la aceptación por ser y no por hacer.
Las tipologías Tres dependen de la fuerza activa y desconfían estar en estado receptivo. Preocupados por la producción y el éxito, harán lo que es necesario para llegar a la meta, adaptando automáticamente su imagen para convertirse en lo que consideran traerá las recompensas. Aquí es donde entra en juego el engaño . Los Tres tienden a tomar atajos y, a veces “manejan” la verdad para lograr el objetivo, lo cual tiene sentido ya que la atención se centra en lograr la aprobación y la creación de una imagen de éxito a través de la realización de tareas.
Seis compromisos para estimular la curación y el crecimiento de los Realizadores

• Aminorar el ritmo y permitir que los sentimientos afloren
• Aceptar los sentimientos, recordando que en un principio surgirán dudas y ansiedades
• Desarrollar la empatía y la comprensión
• Desarrollar la receptividad y la paciencia
• Ser sincero consigo y con sus emociones reales
• Permitirse fracasar